EL ZAPATO FEO
¿Feo? Mejor no lo grites todavía. Antes vuelve a mirarlo pero colócate las gafas nuevas, unas graduadas ya con las dioptrías que nos aumentarán en los próximos seis meses (probablemente en menos). Entonces estaremos tan acostumbrados al ‘zapato feo’ que no nos lo parecerá tanto. Quizá incluso tengamos ya alguno en el armario -un par de modelos probarán suerte en pocas semanas en Zara y de ahí pretenden extenderse al resto de cadenas.
Es la pieza sobre la que se cimentará la nueva temporada, complemento perfecto a los básicos de este otoño. Y es que ambos, básicos y zapato, traen consigo una buena dosis de rebeldía preparada para dar patadas. Precisamente ese leit motiv de querer demostrar que “hago lo que quiero y me pongo lo que me parece” en los próximos meses pasa por obviar el cliché de la mujer femenina y sexy para patear lo que se ponga por delante.
Además, lo dice Miuccia (quien en realidad lo lleva gritando desde hace muchas temporadas) y también Stella McCartney, Chanel, Kenzo… ¿nos subimos?
El último punto a su favor: es cómodo.
El último punto a su favor: es cómodo.
Abajo, de izquierda a derecha: dos modelos de Zara, Opening Ceremony, Kenzo, Robert Clergerie y Pierre Hardy.
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