De la lady fifties a la sweet (six)teen
Ariadna Ferret 19 Enero 2012 2 comentarios
La colección Pre-Fall 2012 de Jil Sander me sirve de percha para hablaros de una tendencia que hacía unas semanas que tenía guardada en la recámara y que viene un poco inspirada por esta foto publicada en el número de enero de Vogue USA:
La fiebre ladylike de la mujer fifties que nos trajeron las colecciones otoño-invierno 2010/11 de Prada o también de Louis Vuitton ha caído ya en el olvido, sin embargo, la moda sigue mirando hacia atrás acompañando la mirada de series fashion como Pan Am, como si quisiera recuperar esos días cándidos y felices del pasado.
Hemos dejado de hornear galletas y de hacer mermelada casera como una ama de casa perfecta, para salir a tomar nuestra primera Coca Cola con los amigos del cole (o, mejor: High School) en el mall de nuestro pueblecito de la america profunda.
¡Viva la despreocupación teen!
La moda se rejuvenece y va en busca de los códigos adolescentes de la época. Parece que Miuccia Prada vio Cry Baby antes de concebir su colección.
Y ahora perdonadme, pero voy a tener que hablar otra vez de Grease porque para la Primavera/Verano 2012 están las chicas Rizzo y las chicas Sandy. Las primeras son las chicas malas, las que llevan su libertad al límite y disfrutan de su juventud a toda velocidad como marca la colección de Prada y su estética ligeramente rockabilly.
Una foto que publicamos hace un mes en nuestro Tumblr: gafas de Miu Miu, Perfecto de Schott NYC, leggings de Juicy Couture, cinturón de Yves Saint Laurent y bolso y sandalias de Prada.
Aunque ni la líder de las Pink Ladies se libra del rosa y del pastel. Porque la cuestión esta temporada es el toque sweet y naïf que impera en esta era.
Llevada al extremo, corresponde a las Sandy, las niñas angelicales y bien cuya máxima diversión es animar al equipo en la liga escolar. La reina de este baile de instituto con aires teen, sport y casual es, sin duda, Isabel Marant, pero sus propuestas tienen un aire más grunge, más nineties. Y aquí se trata del toque retro, cándido y pastelón de los años 50 y 60.
Diane von Furstenberg, Jonathan Saunders, Versus y J.Crew.
Prada, Alexander Wang, Victoria Beckham y Stella McCartney.
Vestido con cintura entallada y falda amplia en amarillo palo de encaje con aplicaciones florales, de Asos (167,70 euros); vestido sudadera estilo túnica, de Asos (41,93 euros); vestido recto con ribetes flúor, de Asos (48,91 euros) y top con cremallera, de Rare (55,90 euros).
Suéter cropped en rosa empolvado, de TopShop (22 libras); bailarinas azul celeste (18 libras); bolsa con asas trenzadas en verde (58 libras); minifalda deportiva con toque flúor, de Asos (34,94 euros); top corto en tonos pastel (39,13 euros); vestido inspirado en la colección de Prada, de Primark (19 euros); camisa sin mangas, de TopShop (30 libras); leggings amarillos (20 libras); bolsa deportiva de lona, de Asos (48,91 euros); vestido blanco ajustado a la cintura con calado, de Chloë Sevigny para Opening Ceremony (550 dólares) y mochila verde troquelada, de Asos (53,11 euros).
Y ahora a tomar un helado, aunque estemos en pleno invierno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario